- • Elegante (acabado cepillado)
- • Ideal para un salpicadero de cocina.
- • Protegido por película
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El acero inoxidable, también conocido como inox, es una mezcla de hierro, carbono y cromo que ofrece una resistencia excepcional a la corrosión y una durabilidad elevada. Gracias a su composición, posee una gran resistencia a la tracción y una excelente ductilidad, lo que lo convierte en la opción ideal para aplicaciones que requieren cortes precisos y a medida.
Tanto en el campo de la construcción, la industria alimentaria como en la decoración, el inox es apreciado por su aspecto estético y facilidad de mantenimiento. También permite obtener acabados elegantes y sólidos para proyectos personalizados, resistiendo los ambientes más exigentes sin necesidad de tratamientos adicionales para prevenir la corrosión.
En nuestro servicio de corte a medida, ponemos a su disposición una selección de láminas de inox de alta calidad, adecuadas para una amplia gama de necesidades. Para satisfacer los requisitos de todos sus proyectos, ofrecemos diferentes grosores que van de 1 mm a 10 mm. Esta flexibilidad le permite elegir el grosor ideal, ya sea para trabajos de precisión, proyectos decorativos o aplicaciones industriales.
Nuestras láminas de inox combinan robustez y estética, mientras ofrecen una excelente resistencia a la corrosión. Ya sea usted un profesional o un particular, nuestro servicio a medida garantiza cortes precisos para un acabado impecable y conforme a sus expectativas.
En el mundo de la cocina y de la restauración, el acero inoxidable es un material de elección. Ofrece una higiene impecable, ideal para una crédence inox. En lo que respecta a la construcción y la arquitectura, el inox es omnipresente. Se utiliza en las estructuras de edificios, fachadas, escaleras y barandillas. Y también, en la industria médica, el acero inoxidable es esencial. Se utiliza para los instrumentos quirúrgicos, el mobiliario hospitalario y los equipos médicos.
Para la decoración de interiores, el acero inoxidable aporta un toque moderno. Se adapta muy bien para el mobiliario, el baño y los accesorios de decoración. Y finalmente, para una plancha de barbacoa o de parrilla, es perfectamente adecuado ya que presenta nociones de higiene y transmisión de calor muy interesantes.
El inox certificado para uso alimentario es el acero inoxidable tipo 304L (también llamado 18/8 o 18/10) y el acero inoxidable tipo 316L (también llamado 18/10/2). Estas dos calidades están reconocidas como perfectamente compatibles con las normas alimentarias vigentes.
Aquí un detalle más preciso sobre estas calidades de acero inoxidable:
Composición: aproximadamente 18 % de cromo y entre 8 y 10 % de níquel.
Aplicaciones comunes: utensilios de cocina, encimeras, fregaderos, cubas, contenedores alimentarios, material profesional para restauración.
Propiedades: Muy buena resistencia a la corrosión. Fácil de mantener, higiénico. Precio relativamente asequible.
¿Necesita información más precisa sobre el inox 304L? No dude en consultar nuestro artículo de blog sobre "¿por qué el inox 304L es compatible alimentario?"
Composición: aproximadamente 18 % de cromo, 10 % de níquel y 2 % de molibdeno.
Aplicaciones comunes: ambientes más agresivos o sensibles como las industrias agroalimentaria, farmacéutica, química, y marítima.
Propiedades: Resistencia reforzada a la corrosión, incluso en presencia de cloro y ácidos. Adaptado a ambientes húmedos, salinos o corrosivos. Más caro que el inox 304, pero necesario para ciertas condiciones específicas.